Sólo la música me sostenía del dolor enloquecedor. Si tan sólo pudiera escuchar mi música… con mis propios oídos… Incluso mientras mi alma se desmoronaba, rezaba a Dios… y volvía a rezar. Ludwig van Beethoven es considerado el más grande compositor de la historia de la humanidad. Cerré los ojos así. Y 180 años después, en Seúl. El santo de la música, conocido como un genio inmortal, ha renacido. Y entonces empecé a oír la voz de un ángel. “Dobin.. Dobin ..” Sólo la música me sostuvo del dolor enloquecedor.
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