Soy una de las 48 concubinas del emperador que pueden jugar y comer por el resto de sus vidas. Pero nunca he visto la cara del emperador. Entonces, un día, cuando estaba pensando en intentar hacer el amor en un juego de realidad virtual, accidentalmente le hice PK a un jugador principiante mientras intentaba atrapar un monstruo. El jugador novato era… ¿¡el emperador!? , y en secreto ofreció un trato. “¿Qué quieres? ¿Se lo doy a la Emperatriz ? ” ¿Podré divorciarme con seguridad del emperador…?
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